En 2002, Nicholas Hoult era un chico cachetoncito y algo torpe que acechó a Hugh Grant en la deliciosa y conmovedora película, "About A Boy". En nuestros cines no hemos visto mucho de él desde su auspicioso debut forjando un vínculo significativo con el personaje de Grant, en el simbiótico proceso de ayudarse mutuamente a alcanzar una vida más rica y plena.
A fines del 2009 ha vuelto, en una metamorfosis en siete años desde ese papel de niño aventurero, hoy se ha transformado en un rostro hermoso y sorprendentes ojos azules de 20 años de edad. Su polémico retorno en la pantalla grande es casi similar a su última vez, ahora obsesionado con un hombre mayor. En este caso, está acechando a su profesor de la universidad, Colin Firth en la adorable película, "A Single Man" (Un Hombre Soltero).
Quienes lo conocen, saben que Nicholas NO ha estado inactivo en el medio, él es protagonista en una popular serie británica de TV, SKINS. Eso explica por qué la mayoría de nosotros nos sorprendemos, no sólo por ver su notable cambio físico, sino también por cuan fascinantes y comparables son sus papeles en About a Boy y A Single Man. Es casi como si el mismo personaje hubiera crecido, pero por la necesidad de un vínculo con un hombre mucho mayor que él.
Sin embargo, el parecido termina allí, ya que en A Single Man su rol es mucho más oscuro y se ocupa de cuestiones actuales de la sociedad como el matrimonio gay, pero, ambientado en 1962, donde la sociedad es menos indulgente. Para empeorar las cosas, Colin Firth, como George, tiene que hacer frente a la reciente muerte de su pareja sentimental, un hombre que ha estado viviendo con él por más de 16 años.
Tenemos sobre todo que seguir la vida de Firth, al verlo en la universidad y experimentando recuerdos de su amante Jim, interpretado por Matthew Goode, mientras Firth prepara un final meticuloso a su vida. Todo esto está entrelazado con el personaje de Nicholas Hoult, Kenny, que, misteriosamente, y muy descaradamente coquetea a su profesor a un grado casi incómodo, utilizando sus hipnóticos ojos azules casi como láseres para enamorar a George.
La mitad de la película muestra una mayor preparación para el fallecimiento previsto de George, incluyendo algunas escenas demasiado largas, pero momentos a veces maravillosas con su mejor amiga Charlie, interpretada por la siempre deliciosa Julianne Moore.
Pero después de una media hora o así y cuando ya nos preguntamos qué pasó con Kenny, y, cómo un buen director y adaptador como Tom Ford lo ha colocado, Hoult aparece en un bar frente a la playa local, donde George se ha ido a tomar una copa final. Sin siquiera una vacilación, Kenny es recibido por George y los dos, en un desafío de Kenny, se sumergen en las aguas del Pacífico durante las primeras horas de la mañana. Entonces, como un hermoso ballet coreografiado, Kenny y George vuelven a su lugar, donde el hombre más joven cuida cariñosamente a George de un grave corte en la frente.
Es un curioso y seductor juego en medio de una conversación manejada por Kenny, co-escrita por Ford y David Scearce, basada en la novela de Christopher Isherwood, y marcado por, lo adivinaste, los icreíbles ojos azules de Hoult.
Lo que sigue, tendrás que ver la película para ver cómo se resuelve. Este artículo es un homenaje a Nicholas Hoult como mejor actor de reparto, quien como adulto es, sin duda ahora una gran promesa, apoyado en Twitter, Facebook y YouTube, por su tierna relación con Firth, un veterano de la actuación. Un logro importante para ambos como actores británicos, es sobretodo para el carácter de Hoult que es un chico de California y ofrece un acento americano impecable.
Si Firth es nominado al Oscar como Mejor Actor, tal como suenan los rumores en la Academia, entonces también debería ser Nicholas como Mejor Actor de Reparto. Hoult es un joven talento maravilloso con el que estaría ansioso de trabajar cualquier director notable, pero mientras tanto lean esto. Dándole los personajes apropiados, bien podría ser el Leonardo DiCaprio de su generación.
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